domingo, 5 de abril de 2009

De que se trata esto

Hola -

Agradezco enormemente el que haya decidido entrar a ver que tengo para contarle al mundo. Como dice el nombre del blog, y como saben quienes me conocen, desde enero de 2008 estamos viviendo en Toronto con Camila y desde el 24 de julio de 2008 con el nino mas hermoso del mundo, nuestro adorado Martín Gregorio.

Antes que todo, quiero pedir disculpas por la ausencia de tildes y de la letra "ñ", ya que mi computador no tiene dichos caracteres.

De que se trata entonces este espacio? Simplemente de contar lo que vive un colombiano lejos de su tierra, de lo que ve un inmigrante en Canadá, de compartir la visión de Colombia que se tiene desde afuera. Creanme, desde afuera uno puede ver el bosque en vez de fijarse en los arboles. 

Por ejemplo, acabo de leer que un jugador del Deportivo Cali fue herido por un grupo de hinchas de Millonarios cuando se dirigía al Campin al partido del 5 de abril. El partido se pospuso unos minutos, pero empezó finalmente a las 6:45 pm. Realmente, esto es increíble. No tanto el hecho de que un mal llamado hincha hiera a un jugador del equipo rival, sino que el partido no se suspenda, que no se utilice este hecho para hacer un llamado a la reflexión. El fútbol colombiano es un síntoma de la enfermedad que carcome al país, y es la violencia a flor de piel que tenemos todos. 

El ano pasado al menos 10 hinchas fueron asesinados por integrantes de barras de equipos contrarios. Eso no es normal, eso no merece dejar pasarse por alto, eso merece un llamado a la reflexión. Dejar pasar un hecho tan grave como que un hincha hiera a un jugador profesional de fútbol y no suspender el partido para analizar el hecho es una muestra de que no tomamos en serio el grado de violencia que sufre nuestro país. "Eso es normal", pensaran muchos mientras ven por televisión el juego. No, esto no es normal y la presion de los canales de televisión que tienen que pasar el partido a como de lugar y respetar el compromiso adquirido con los anunciantes, no debería estar por encima de un síntoma evidente de uno de los problemas de nuestro país.  

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